Cheyenne fue uno de los superordenadores más potentes del planeta. Ha quedado “obsoleto” y EEUU lo está subastando

  • El equipo fue instalado en el Centro de Supercomputación NCAR-Wyoming en 2016

  • Tiene un rendimiento de 5,34 petaFLOPS, pero ha sido reemplazado por un sistema más moderno

Cheyanne Portada4
9 comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail

Si tienes algo de espacio y, sobre todo, mucho dinero, ahora podrías intentar comprar el que alguna vez fue uno de los superordenadores más potentes. Estamos hablando de una bestia que, incluso en estos tiempos, presume de un rendimiento de 5,34 petaFLOPS y que, cabe señalar, funciona con Linux Enterprise Server.

Cheyenne, que es como se le conoce a nuestro protagonista, ocupó el puesto 20 del famoso ranking Top500 de sistemas informáticos destacados en el momento de su instalación en 2016. Comenzó a funcionar un año más tarde en el Centro de Supercomputación NCAR-Wyoming, pero ya ha cumplido su ciclo.

EEUU subasta el superordenador Cheyenne

Durante casi siete años, Cheyenne fue un recurso clave para investigadores de diversas áreas. Estos utilizaron su potencia de cómputo para ejecutar simulaciones y cuantificar probabilidades de eventos futuros, dando lugar a más de 4.500 publicaciones revisadas por pares y otros documentos académicos.

A nivel de hardware, el sistema tenía 4.032 nodos, cada uno con dos procesadores Intel Xeon E5-2697v4 "Broadwell" de 18 núcleos que funcionaban a 2,3 GHz. Los nodos, sin embargo, tenían diferencias a nivel de memoria. Mientras que unos tenían 64 GB, otros tenían 128 GB. Todo esto estaba conectado por Mellanox EDR InfiniBand.

Cheyenne

Una de las grandes ventajas de Cheyenne, ampliamente superada por sistemas más modernos, era su eficiencia energética. Cuando se puso en funcionamiento, triplicaba la potencia de su predecesor Yellowstone, pero solo consumía un 25% más de energía. No obstante, estaba programado para ser reemplazado tras cinco años de uso.

Sin embargo, los problemas de suministro relacionados a la pandemia de COVID-19 hicieron que el NCAR extendiera su vida útil por dos años más. Ahora finalmente será reemplazado por un nuevo sistema de alto rendimiento HPE-Cray EX de 19,87 petaFLOPS, pero los 5,34 petaFLOPS de Cheyenne todavía pueden ser de utilidad para alguien.

Se trata de una potencia de cómputo enorme, pero sustancialmente inferior a Frontier, el supercomputador más avanzado de la actualidad, una bestia que ha alcanzado del hito de romper la barrera de la exaescala con sus 1.194 petaFLOPS (Rmax). Frontier se encuentra alojado en el Laboratorio Nacional Oak Ridge.

Volviendo al tema de Cheyenne, al momento de escribir este artículo, la puja que comenzó con 2.500 dólares se ha elevado a 350.000 dólares, con 26 interesados en el superordenador. La subasta llegará a su fin en aproximadamente 4 horas este viernes 3 de mayo, por lo que no queda mucho tiempo para poder comprarlo.

Imágenes | GSA Auctions

En Xataka | Huawei se ha infiltrado en el núcleo científico de EEUU: está patrocinando en secreto investigación de vanguardia

Inicio